La ola de violencia en el Ecuador que alcanza principalmente a Guayaquil, ciudad donde delitos como el homicidio han crecido un 270%, han motivado al presidente Guillermo Lasso a tomar acciones urgentes. Primero, se nombró a nuevo comandante de la Policía Nacional, el general Carlos Cabrera.
Acto seguido, el primer mandatario anunció el desembolso de USD 9 000 000 del Presupuesto General del Estado para que la Policía invierta en equipamiento como autos, motos y otros equipos para Guayaquil. A esta medida se sumó el anuncio de que 1 100 policías más llegarán a reforzar la seguridad de la urbe porteña, que en lo que va de enero 2022 registra 74 muertes violentas, en ese mismo lapso de 2021 se registraron 20 homicidios.
Para atender la situación de Guayaquil el Presidente dispuso el traslado del viceministro del Interior, Max Campos, a esta ciudad y que el Cuartel Modelo sea el centro de operaciones para controlar la seguridad del Ecuador.
“El funcionario tendrá entre las principales tareas: ejecutar y coordinar la presencia de 1.100 policías adicionales en la urbe porteña. Asimismo, desde hoy coordinará con las Fuerzas Armadas para mantener activa su presencia en las calles a fin de recuperar la confianza y seguridad de los ciudadanos y fortalecer el control de armas y drogas que atraviesan por el cordón fronterizo; así como en la trazabilidad sobre la producción de municiones y armas que son utilizadas en los actos delincuenciales”, explicó Lasso.