Netflix perdió 200.000 suscriptores durante el primer trimestre de 2022, periodo en el que obtuvo unos beneficios netos de 1.597 millones de dólares, por debajo de los 1.706 que logró durante los tres primeros meses del año anterior. Inmediatamente después de que la empresa anunciara este martes su primera reducción en el número de clientes tras más de una década, sus acciones cayeron un 28 % en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de los parqués neoyorquinos.
La pérdida de 200.000 abonados quedó muy lejos de las previsiones de Netflix para el arranque de 2022, que esperaba añadir 2,5 millones de clientes en todo el mundo. «A corto plazo no estamos aumentando los ingresos tan rápido como nos gustaría», admitió la compañía, con sede en Los Gatos (California, EE.UU.), en una carta dirigida a sus inversores.
En la actualidad, Netflix cuenta con 221,64 millones de abonados a su servicio de «streaming» en todo el mundo, pero a medida que aumenta la competencia, su capacidad de atraer nuevos clientes está disminuyendo, ya que en 2021 registró el menor crecimiento de los últimos tres años. Así, en las previsiones para el próximo trimestre ha rebajado sus expectativas y anticipa la pérdida de más de 2 millones de abonados.
La empresa vinculó su estancamiento a la aparición de nuevos competidores, como Disney y Apple, pero también recordó que la suspensión de su servicio en Rusia tuvo como consecuencia la pérdida de 700.000 abonados de ese país. Si no hubiera tomado esa decisión, el balance de este trimestre habría sido diferente con 500.000 nuevos usuarios, insistió la compañía.
La inflación, la inestabilidad política por la guerra de Ucrania y la paralización de rodajes por el impacto del coronavirus son otros motivos con los que Netflix justificó sus resultados. En total, la empresa facturó en el primer trimestre de 2022 casi 7.868 millones de dólares, más que en el mismo periodo del año anterior, pero su margen de beneficios cayó al 25% frente al 27% de 2021.