Subastarán la pelota

2022 se convirtió en uno de los años en donde las subastas deportivas no paran de romper récords.

Después de los 9.2 millones de dólares que se abonaron por la camiseta que utilizó Diego Maradona ante Inglaterra en el Mundial de 1986 en mayo, y los 10,1 que desembolsaron en septiembre por la que llevó Michael Jordan en el primero de los seis partidos de las finales de 1998, un nuevo artículo promete ubicarse dentro del top de los más costosos de la historia.

Se trata del balón con el que el legendario futbolista argentino marcó los dos goles más recordados de la historia de los Mundiales: la Mano de Dios y el Gol del Siglo. Así lo confirmó la casa de subastas Graham Budd Auctions a través de su página web e informó que el evento se llevará a cabo el próximo 16 de noviembre.

“Este balón es parte de la historia del fútbol internacional, parece el momento adecuado para compartirlo con el mundo”, aseguró el ex árbitro tunecino Ali Bin Nasser, propietario de la reliquia en cuestión.

“En México ‘86 estuve entre los 42 árbitros del torneo. Los árbitros africanos no tuvieron las mismas oportunidades que los de Europa, por lo que que la FIFA me dijera que fui elegido porque estaba entre los mejores del mundo fue un gran honor y un hito en mi carrera”, agregó en declaraciones publicadas en la página oficial de la casa de subastas.

Cabe destacar que, además, Ali Bin Nasser resolvió un misterio oculto desde hacía 36 años ya que hasta hoy nadie sabía quién era el propietario de esta pieza histórica. En diálogo con Infobae en el mes de junio, Andreas Alf, jefe de comunicaciones del Museo de la FIFA, destacaba que “el balón del partido Argentina-Inglaterra de México 1986 no integra la Colección del Museo de la FIFA”, mientras que el juez asistente de aquel partido, el costarricense Berny Ulloa, le aseguró al periodista Andrés Burgo que “un funcionario de la FIFA se la llevó”.

La pelota, que para ese Mundial se denominó “Azteca” y fue la primera que hacía alusión a la cultura del país anfitrión en su diseño, tendrá un valor estimado de entre 2,8 millones de dólares y 3,5 millones.

En lo que respecta al contexto, el balón se utilizó para marcar dos de los goles más famosos de la historia de los Mundiales durante los cuartos de final de esa edición. Aquel día Maradona convirtió un polémico gol con la mano por encima de la cabeza del arquero y otro en el que eludió hasta a cinco rivales ingleses antes de definir tras dejar tirado por el césped a Peter Shilton.

Fuente: Infobae.com